Paso tambaleando por el pasillo del avión con dificultad por la cantidad de gente, julio esta por acabar pero en lima no hace frió, sino todo lo contrario. Pero el aire acondicionado me juega una mala pasada y empiezo a sentir frió.
Buscando mi asiento (que esta en la cola del avión) cruzo la mirada con los ojos azules de una rubia.
La rubia del avión
Me dice en español (con un marcado acento anglosajón) si esta ocupando mi asiento, le digo que si a la vez que el aire acondicionado aumenta, provocandome un escalofrío. Ella se levanta y yo ocupo mi lugar al lado de la ventana.
En eso llega un compatriota y toma lugar en el ultimo asiento al lado del pasillo.
Ahora somos 3 en la fila, yo a la ventana, la rubia en medio y el hombre aquel al lado del pasillo. El avión despega y yo miro con nostalgia el cielo oscuro por la ventanilla observando como las luces se hacen mas pequeñas.
Voy pensando en cosas que me hagan olvidar el miedo que me da viajar en avión, eso en parte se lo debo a las películas de atentados terroristas o esa en donde aparecen un montón de serpientes matando a todos en el avión, cuando oigo a la rubia murmurar algo.
Está hablando con el hombre que se sentó en el asiento al lado del pasillo, no puedo evitar escuchar lo que dicen.Hablan de la vida, de sus vidas en lima y de lo que harán de ellas en los estados unidos (y de lo que no harán tambien). Ambos ríen y hablan, hablan y ríen y yo sigo mirando por la ventanilla las nubes del atlántico norte. La rubia me pide prestado mi lapicero y yo me quedo dormido al poco rato.
Ya como a las 7 am el avión aterriza, me dirijo al área donde salen las maletas justo para encontrarme con la rubia y al compatriota aquel, riéndose. Me da un poco de vergüenza así que logro guardar distancia. Cojo mi maleta y me dirijo a la sala de espera (tenia otro vuelo que tomar). Y justo cuando empezaba a relajarme, los veo venir. La rubia me mira, mete la mano a uno de sus bolsillos y saca el lapicero que le preste en el avión.
Cojo mi lapicero, me agradece y juntos desaparecen por el umbral del caluroso Miami.
chévere relato tío, tus relatos tienen esa particularidad de relajarme, no se porqué..
ResponderEliminarloco, la probabilidad de que sufras un accidente en un avión es de 1 en un millón, lo dicen las estadísticas, no temais..
Gracias por el comentario. Pasaré más seguido.
ResponderEliminarjajajaaja que paja y es como la canción de P.S.V con una rubia en el avión ♪
ResponderEliminarGenial!
le hubieras hecho el habla tu, tambien te quedas ahhah
ResponderEliminarEBP: jajaj si lo se pero igual me da miedo no se por que.
ResponderEliminarS.U: gracas tu tambien por darte una vuelta por aqui.
LOLA: jajaj si ps esa cancion es buena.
Jaime: jajaj no nada no me gustan mucho las rubias.
saludos a todos
la rubia es honesta te devolvio el lapicero, pero igual pienso q pudiste ser tu el que hablara con ella y te diera su cel o correo
ResponderEliminarOye gracias por pasar por mi blog y todo, pero no entendí el post, cuál es el chiste de hablar sobre una rubia si no te gustan las rubias y encima solo le diste un lapicero. Supongo que algo se me está escapando. =)
ResponderEliminarPD. supongo que así como me has linkeado invisiblemente, te linkearé invisiblemente también =P
ResponderEliminarme parece q ya habia comentado :$
ResponderEliminarq raro
bueno, haber sino querias con la chica, el post es porque no sueles ver a parejas ligar al lado tuyo ¿?
Pumara: lo repito, no me gustan mucho las rubias.
ResponderEliminaryared: sorry se me escapo tu link jajaja ahor ate enlazo
damian: supongo que EBP es el unico que encuentra sentido a mis post U_U. PS: a mi tambien me parecio que habias comentado :S
Chévere, también te he enlazado en la sección de personales (sí, necesito una sección de "relatos").
ResponderEliminarY en cuanto al roche de los comentarios últimamente blogger está haciendo cojudeces, porque en varios blogs se está dando cosas parecidas.
malditos bricheros... bueno, aunque las gringas siempre quieren un recuerdo que lave, planche y cocine px!
ResponderEliminarjavier: jajajaj que bueeeeeeena. pero mas que nada, me dio verguenza ajena.
ResponderEliminarMe gusto la simplicidad del relato, que no se que tendra pero que te captura y te obliga a seguir leyendo.
ResponderEliminarY sobre los libros que te recomiendo:
- Eragon - Christopher paolini
- El apostol numero 13 - michell benoit